Cinco formas en que las enfermedades dentales pueden afectar a la salud de tu perro

Al igual que los humanos, los perros necesitan una buena rutina de higiene dental para mantener sus dientes y encías en óptimas condiciones. Si sus dientes no se cuidan adecuadamente, corren el riesgo de desarrollar enfermedades dentales. Esto no solo afecta a la boca, los dientes y las encías, sino que también puede generar problemas en otras partes del cuerpo.

Sigue leyendo para conocer cinco formas en que las enfermedades dentales pueden afectar a la salud de tu perro.

1. Fracturas mandibulares

Aunque puede sonar drástico, más perros de los que imaginas se fracturan la mandíbula como resultado de una enfermedad dental. Esto es más habitual en razas pequeñas con dientes proporcionalmente más grandes, como chihuahuas, malteses y shih tzus.

Afecciones como la infección crónica y la enfermedad periodontal (enfermedad de las encías) pueden debilitar gradualmente la mandíbula de un perro, y algo tan simple como saltar de un sofá o comer croquetas crujientes puede acabar provocando una fractura de su mandíbula

2. Mayor riesgo de enfermedad cardíaca

Según la WSAVA (Asociación Mundial de Veterinarios de Pequeños Animales), la enfermedad periodontal está relacionada con enfermedades cardíacas como la endocarditis (una infección potencialmente mortal). El riesgo de endocarditis puede ser hasta seis veces mayor en perros con enfermedad avanzada de las encías.

Aunque se desconoce la razón exacta, las dos afecciones a menudo se presentan juntas, y la bacteria presente en la endocarditis es idéntica a la identificada en la enfermedad periodontal.

3. Dolor y malestar

Es poco común que un perro muestre signos de dolor pero las enfermedades dentales pueden resultar cada vez más molestas.

Muchos perros evitan comer por el lado afectado de la boca para evitar el dolor o comienzan a preferir comida húmeda a las pienso seco.

Una vez que el problema comienza a causar dolor, es más probable que desarrolle infecciones secundarias, lo que puede complicar la afección. En ocasiones, el dolor es causado por un problema repentino, como un diente roto o un objeto alojado entre los molares.

Aunque tu perro pueda ocultar con éxito el problema, el dolor puede tener un impacto en su calidad de vida e incluso provocar cambios de comportamiento como agresividad o depresión.

4. Pérdida rápida de peso

A medida que la enfermedad dental avanza, a tu perro le resultará cada vez más difícil comer por lo que puede parecer que pierde el apetito por completo a medida que se vuelve demasiado doloroso masticar.

Esto puede provocar una rápida pérdida de peso, lo que causa muchos problemas ya que si no comen lo suficiente, no recibirán todos los nutrientes esenciales que su cuerpo necesita para funcionar correctamente.

Si la afección no se trata, el sistema inmunológico de tu perro se debilitará y será incapaz de combatir otras infecciones o enfermedades.

5. Promueve la inflamación

Una infección dental aumenta la cantidad de bacterias, esto activa el sistema inmunológico y provoca inflamación. La respuesta inflamatoria elimina las bacterias, pero también destruye el tejido sano en el proceso por lo que puede provocar pérdida de tejido, dolor e infección en el área circundante.

En los casos graves de enfermedad dental se produce mayor inflamación, lo que aumenta el riesgo de que las bacterias entren en el torrente sanguíneo y migren pudiendo causar daños e infecciones en otras partes del cuerpo.

Prevención de enfermedades dentales

La mejor manera de prevenir las enfermedades dentales y evitar sus graves efectos secundarios es establecer y mantener una rutina de higiene dental con tu perro. Esto incluye cepillarlos regularmente con pasta de dientes apta para perros, alimentarlos con una dieta baja en azúcar y asistir a revisiones dentales periódicas.