Tu guía completa sobre la nutrición canina

¿Cuál es la mejor dieta para perros?

Desafortunadamente, no hay una respuesta única a esto, ya que la dieta "correcta" varía según las necesidades de tu perro. Los perros son omnívoros, por lo que tienen la capacidad de digerir tanto la carne como las verduras. Por eso necesitan una dieta equilibrada de proteínas, grasas, fibra, minerales y vitaminas. Una comida equilibrada y de alta calidad siempre es mejor que una alternativa de baja calidad.

¿Es mejor la comida húmeda o seca para los perros?

Hay varios tipos de comida para perros disponibles, pero la comida seca descrita como "completa" suele ser la mejor opción. Esta contiene todos los nutrientes que tu perro necesita en una forma conveniente y fácil de almacenar. También es mucho mejor para la salud dental de tu perro que la comida húmeda, ya que ayuda a eliminar la placa y el sarro de los dientes. Además contienen mucha menos agua y una mayor concentración de nutrientes, lo que significa que no es necesario darles tanta cantidad.

La comida húmeda es más fácil de comer para los perros que se están recuperando de una lesión u operación y puede ser beneficiosa para los animales con ciertas enfermedades.

Muchos tutores optan por una mezcla de ambos, ya que aunque ensucien más, a muchos perros prefieren la comida húmeda.

Cómo elegir el alimento adecuado para tu perro

Sea cual sea el tipo que elijas, mira siempre la lista de ingredientes. Estos se enumeran proporcionalmente y, como regla general, la carne o el pesacdo debe ser el primer ingrediente, ya que es la mejor proteína para el cuerpo de tu perro. Evita los alimentos que utilizan términos amplios como "derivado animal", "harina" o "cereales" en sus primeros ingredientes, ya que generalmente indican un alimento de menor calidad.

Tu veterinario puede asesorarte sobre la dieta de tu perro teniendo en cuenta su edad, estilo de vida y cualquier condición de salud existente.

¿Qué alimentos humanos son venenosos para los perros?

Antes de dar a tu perro parte de tu comida, debes conocer qué alimentos frecuentes son tóxicos para ellos. 

Algunos alimentos comunes que debes evitar estrictamente dar a tu perro:

• Frutos secos
• Cebolla
• Uvas
• Chocolate
• Puerro
• Ajo
• Huesos sobrantes

¿Debo seguir con la misma comida durante toda su vida?

Las necesidades nutricionales de tu perro cambian a medida que envejece, por lo que es posible que debas modificar su dieta. Por ejemplo, los cachorros menores de un año necesitarán una dieta que alimente su estilo de vida enérgico al tiempo que apoye el desarrollo saludable del cerebro, los ojos y los huesos. Del mismo modo, los perros mayores de siete años deberán cambiar a un alimento que mejore su movilidad y función cerebral.

¿Puede la dieta ayudar con las condiciones de salud de los perros?

Puede ser que tu perro necesite una dieta especial para ayudar a combatir los efectos de afecciones de salud como problemas renales, dolor en las articulaciones y artritis, problemas de la piel, afecciones digestivas o alergias alimentarias. Si tu perro desarrolla alguna de estas afecciones a lo largo de su vida, es posible que tengas que cambiar su comida para adaptarla a sus necesidades. Como siempre, tu veterinario estará encantado de recomendarte la mejor opción.

Si necesitas cambiar su dieta por cualquier motivo, es importante que lo hagas gradualmente, ya que un cambio repentino puede alterar su estómago y hacer que pierda el apetito. Comienza agregando una pequeña cantidad de la comida nueva a su comida habitual, aumenta gradualmente la cantidad de comida nueva (mientras disminuyes la cantidad de la otra comida) en el transcurso de una semana hasta que coma solo la comida nueva.

¿Cuánto debo alimentar a mi perro?

La cantidad que tu perro debe comer se relaciona con su raza, edad y tamaño. Todos los alimentos para perros tienen pautas en su envase, y este suele ser un buen punto de partida. A continuación, tendrás que vigilar su peso para saber si está comiendo demasiado o muy poco. A grandes rasgos, debes ser capaz de sentir, pero no ver, las últimas dos o tres costillas cuando miras desde un lado, y una cintura clara cuando miras desde arriba. Tu veterinario también revisará el peso de tu perro en su revisión de salud para asegurarse de que sea el correcto.

Una vez que hayas decidido la cantidad adecuada de comida para tu perro, es buena idea pesarla al comienzo del día para evitar la sobrealimentación.

¿Con qué frecuencia debo alimentar a mi perro?

Una vez que hayas decidido cuánto debe comer tu perro, puedes dividirlo en pequeñas comidas a lo largo del día. Esto es flexible, pero dos o tres comidas al día ayudan a evitar la torsión gástrica (una enfermedad potencialmente mortal) que se ha relacionado con la alimentación con una comida grande al día. Ciertas razas, como el gran danés, el setter irlandes o el braco de Weimar, corren mayor riesgo de sufrir torsión gástrica, por lo que se recomienda darles comidas más pequeñas.

Algunos tutores prefieren la alimentación a demanda en la que la comida (generalmente pienso seco) está a su disposición durante todo el día a horarios estrictos de comidas, para que el perro elija cuándo y cuánto comer. Si prefieres este método, es importante medir su cantidad diaria recomendada al comienzo del día y rellenar el tazón a partir de esa cantidad. Una vez que se ha terminado, no añadir más.

La constancia es clave, así que sigue siempre la rutina de alimentación que hayas elegido.

¿Cuántas golosinas puedo darle a mi perro?

No hay nada de malo en una golosina de vez en cuando para recompensar el buen comportamiento de tu perro, pero es importante no excederse ya que pueden ser altamente calóricas. Elige siempre golosinas que sean bajas en azúcar y carbohidratos y limita la cantidad que le das. Las golosinas no deben constituir más del cinco al diez por ciento de la dieta de tu perro. Las golosinas más grandes se pueden dividir en pedazos más pequeños, lo que significa que puedes darle a tu perro algunas recompensas sabrosas sin sobrealimentarlo.

A muchos perros les gustan las frutas y verduras frescas que son mucho más bajas en calorías y, en general, mejores para su mascota. Los trozos de manzana, los arándanos y las zanahorias pequeñas son algunos ejemplos que suelen ser populares entre los perros. Aun así, es importante limitar estas golosinas, ya que pueden tener un alto contenido de azúcares naturales.

Las frutas y verduras en pequeñas cantidades están bien, pero otras golosinas humanas pueden causar problemas reales. La mayoría de los perros son maestros en "mendigar" cuando alguien está comiendo y una pequeña golosina humana puede no parecer mucho, pero suma y puede provocar sobrepeso en el perro y que desarrolle un gusto por la comida humana, exacerbando el comportamiento de mendicidad y los ojos de cachorro.

Si decides darle una golosina a tu perro, es importante que reduzcas ligeramente su comida habitual para equilibrar su ingesta diaria.

No te olvides de su hidratación

El agua es una parte esencial de la nutrición de tu perro, y no beber lo suficiente acarrea graves consecuencias. La mayoría de los perros beben suficiente agua, pero es posible que algunos no, por lo que es posible que debas buscar formas de alentarlos activamente a mantenerse hidratados.

El tamaño de su cuenco de agua puede influir en la cantidad de agua que beben los perros; los cuencos altos y estrechos son los mejores para perros con orejas largas como los basset hounds y los spaniels; los cuencos bajos y poco profundos para las razas pequeñas; y los cuencos grandes y anchos para las razas medianas y grandes. Asegúrate de que su agua esté siempre fresca, limpia y disponible para fomentar el consumo regular de agua. Si tu perro aún no bebe lo suficiente, darle comida húmeda puede complementar su ingesta de agua.

En algunos casos, la falta de sed o el excesivo consumo de agua, pueden ser signo de una afección subyacente. Si te preocupa la dieta de tu perro o tienes preguntas sobre el alimento adecuado, habla con tu veterinario.